Can Bruguera-Font del Malpàs-Creu de Rupit-Turó de Can Tunyí-Can Bruguera

Aprox. 20 km
4h caminando, ida y vuelta
Desnivel 250 m. aprox.
Dificultad: baja-media

Tomamos la salida en el campo de futbol de Can Bruguera (Mataró) dirección Norte, hacia Canyamars. Tiene lugar el descenso más acusado de la ruta.

Llegamos hasta el cruce, ya en la riera de Can Rimbles, donde se encuentra la masia de Can Bartés, donde tomaremos el camino hacia el Este, subiendo riera arriba (la pendiente está muy poco acusada). El pavimento asfaltado nos acompañará durante unos kilómetros, desde donde veremos Can Guinart, Can Maltes, un centro eqüestre, Can Rogent, Can Brugueràs,...

Continuando este camino vuelve a hacerse de tierra y comienzan algunas curbas mas pronunciaas con pequeños repechos y, después de un tramo mas o menos recto, después de un giro pronunciado, llegamos a la plaça de les Fontetes y acto seguido a la Font del Malpàs. en el cruce de la plaça, giramos hacia NW (por el GR-83) y nos llevará al Pi de les fontetes y siguiendo esa misma pista principal, llegamos a la Creu de Rupit (no esperéis una gran cruz como monumento sino una discreta cruz metálica, al lado de un gran portal de finca). En el cruce de la Creu de Rupit al NW queda un campo el cual es ideal para desayunar aprovechando el sol de la mañana.
Deshacemos el camino en el sentido contrario al que vinimos, hasta volver a la Plaça de les Fontetes. Una vez aquí seguiremos por el GR, en direccion SW. En la primera bifurcación importante tomaremos hacia la izquierda, el camino de subida.y no abandonaremos el GR hasta llegar a Can Brugera de nuevo, pasando por la ermita de Llorita, el Turo de Can Tunyí, la Pedra del Llop, la Plana dels Brucs entre otros acontecimientos orográficos. A la altura de la Pedra del Llop no perderse las vistas hacia el SE, donde se ve Mataró desde un punto de vista especial.











Riera de Can Rimbles, donde las nieblas matutinas todavía no se han desvanecido.












Árboles de hoja caduca sobre la Font del Malpàs, que en época de otoño nos ofrecen un colorido especial.











Plana dels Brucs (gran pinar ideal para jugar)




















Pedra del Llop. Escondida en el lado mar del camino, acecha al caminante.




















La fauna arácnida es rica por estos parajes. La hermosura de sus construcciones cautivan al caminante.